Saltar al contenido

IDENTIDAD DE GÉNERO

¿QUÉ ES IDENTIDAD? 

El diccionario define la identidad como el conjunto de características, rasgos propios, datos o informaciones que son propias de una persona y que permiten diferenciarla del resto.

El concepto que tenemos de nosotros mismos va configurando nuestra identidad. Hace  referencia a la conciencia  que una persona tiene  de sí misma y que la convierte en alguien distinto a los demás. El entorno ejerce una gran influencia en la conformación de la especificidad de cada sujeto.

La identidad es como el sello de la personalidad. Es evolutiva y está en continuo cambio. No es una característica dada sino que se desarrolla y forma parte de la historia de cada persona. La identidad se empieza a construir desde el mismo momento del nacimiento, y se va estructurando a través de la experiencia propia y de la imagen de uno mismo percibida en los demás.

Los procesos de socialización juegan un papel relevante en la constitución de las identidades y específicamente, en las de género.

La identidad de género 

La identidad de género, es una construcción cultural cuyo contenido es variable de una cultura a otra, de un tiempo histórico a otro.

El género es una de las variables que en mayor medida afecta a la conducta social.

La identidad de género se ha definido tradicionalmente como masculinidad en hombres y femineidad en mujeres bajo el supuesto de diferencias sexuales. 

Crecemos como hombres y mujeres dentro de una sociedad y una cultura en la que vamos adquiriendo los conocimientos, los valores, roles o modelos que configuran nuestra manera de ser, pensar y de actuar.

Desde que nacemos vamos recibiendo mensajes sobre lo que se espera de nosotros, lo que significa ser  hombre y como mujer. Se trasmiten en forma de expectativas, modelos y conforman nuestra identidad. Son mensajes formativos de género.

Niñas y varones, al ingresar desde su nacimiento a la cultura, encuentran que ésta ya tiene construidos los modelos, las prescripciones y prohibiciones que irán conformando al yo y a sus ideales.

El mecanismo de la identificación nos permite reconocernos como iguales a aquellos del mismo género. Junto con el saber sobre el género, se incorporan las normas y reglas que prescriben lo que es «natural», propio de las niñas y las mujeres, y de los niños y hombres, y al mismo tiempo lo que nos diferencia del otro género, también incorporando normas y reglas.

En base a ideales de hombre y mujer y de formas de relación supuestamente complementarias, se construyen los conceptos de masculinidad y feminidad. Así, los estereotipos genéricos, es decir, las creencias generalizadas sobre cómo son o deben de ser las personas según su sexo, son los que definen roles, papeles distintos que deben desempeñar hombres y mujeres. En la mayoría de la población, la visión del hombre y de sus tradicionales “virtudes naturales” se expresan y se relacionan con el poder, la destreza, la fuerza física, la agresividad, la valentía, el afán de emulación, la libertad, la determinación, la fortaleza y la frialdad emocional, etc. 

La identidad femenina, en general, cifra sus características de género a partir de la fragilidad, mientras la identidad masculina lo hace a partir del poder. El concepto de feminidad se refiere a ideales tales como: sociabilidad, preocupación por los demás, capacidad de sufrir y soportar, expresividad, ternura, dulzura, fragilidad, pasividad, dependencia, sumisión


La definición de masculinidad y feminidad es personal, cada individuo forma un complejo sistema de creencias acerca de sí mismo, que incluye un sentido de sí mismo, masculino o femenino. Cada significado de género de la persona es una creación individual por lo que hay así muchas masculinidades y feminidades. 

La experiencia de género de un varón no se determina únicamente por su sexo, sino por el lugar que ocupa dentro de las categorías raciales, étnicas, de clase, regionales, institucionales, etc. de la sociedad en que vive. Desde esta perspectiva también se puede hablar de múltiples masculinidades definidas contextualmente y contrastadas con lo que no se debe ser, lo cual constituye, a su vez, sus límites. 

Así, la identidad de género de cada persona es también un lazo, virtualmente una fusión, de significado personal y cultural.

La identidad respecto a los roles de género no debe ser confundida con los roles aprendidos y socialmente determinados, se refiere más bien a una representación intrapsíquica e interactiva. 

La relación entre ambos conceptos viene definida por el hecho de que la identidad de género es la experiencia personal del papel del género, mientras que éste es la expresión pública de aquél.

En el próximo post nos centraremos en la identidad masculina y su representación.

LLÉVATE GRATIS LA GUÍA DE TÉCNICAS DE RELAJACIÓN

¡SUSCRÍBETE!

Aprende a relajarte con 6 sencillas técnicas. Maneja la ansiedad, el estrés y el nerviosismo en cualquier situación.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Dime dónde quieres que te envíe la guía

GRATIS

¿En qué puedo ayudarte?

Dime dónde quieres que te envíe la guía

GRATIS

Pendiente de fecha

19:30 a 21:00 Horas (hora de España)

www.pensart.es

Debate sobre "Historia de un Matrimonio"

Introduce tus datos para inscribirte

¿Has olvidado tu regalo?

Con nuestra guía de Técnicas de Relajación aprenderás a relajarte fácilmente en cualquier lugar y situación.